Pastor's Weekly Update: Sunday, November 5th, 2022

Dear Brothers and Sisters in Christ,

On Wednesday this week we celebrate the Feast of the Dedication of the Lateran Basilica, the cathedral of the Diocese of Rome, and the mother of all churches of the City and of the world. Feasts like this remind us of our heritage as Catholics and the importance of our belonging to the universal Church.

This is the time of year when Father Logan and I start having more meetings with couples preparing to get married in the next wedding season, which is always a delightful part of our priestly ministry. Please know that we have lots of weddings and other celebrations at St. John’s (thanks be to God!) and our Saturday schedule fills up quickly.

A couple weeks ago I had the chance to attend the Fort Wayne Philharmonic’s performance of Carmina Burana (you have inevitably heard the first and final movement of the piece – just look up “O Fortuna” on YouTube). This is an epic piece of music written for orchestra, three choirs, two pianos, and three soloists. It is almost completely in Latin, with occasional interludes in High Middle German, and lasts about 90 minutes. The audience, which was the largest I have ever seen for a Philharmonic concert, seemed thoroughly to enjoy the piece, despite the fact that no translations were provided. I did not observe anyone complaining about not understanding the words. I think that gives one a new perspective on occasionally listening to two or three minutes’ worth of music one might not immediately comprehend.

Thank you to everyone who has made a pledge on behalf of our parish to the Annual Bishop’s Appeal! If you have not yet made your pledge, go online right away to make yours: diocesefwsb.org/aba. Meeting and exceeding our goal will give us some extra money to support the refurbishment of our new parish office building and keep us from having to dip into our savings. Thank you for your commitment and your generosity!

Recent read: National Catholic Bioethics Quarterly. 21:3 Autumn 2021. This issue focused on the provision of artificial nutrition and hydration at the end of life. This turned out to be a much more complicated issue that I had previously realized.

St. John the Evangelist, pray for us!

Yours in Christ,

Father Royce Gregerson

Queridos hermanos y hermanas en Cristo,

El miércoles de esta semana celebramos la fiesta de la Dedicación de la Basílica de Letrán, la catedral de la diócesis de Roma, y la madre de todas las iglesias de la ciudad y del mundo. Este tipo de fiestas nos recuerdan nuestra herencia como católicos y la importancia de nuestra pertenencia a la Iglesia universal. Esta es la época del año en que el Padre Logan y yo comenzamos a tener más reuniones con parejas que se preparan para casarse en la próxima temporada de bodas, que es siempre una parte encantadora de nuestro ministerio sacerdotal. Por favor sepan que tenemos muchas bodas y otras celebraciones en San Juan (¡Gracias a Dios!) Y nuestro horario de los sábados se llena rápidamente. Hace un par de semanas tuve la oportunidad de asistir a la interpretación de Carmina Burana por parte de la Filarmónica de Fort Wayne (inevitablemente has escuchado el primer y último movimiento de la pieza, solo busca "O Fortuna" en YouTube). Es una pieza de música épica escrita para orquesta, tres coros, dos pianos y tres solistas. Es casi completamente en latín, con interludios ocasionales en alto alemán medio, y dura unos 90 minutos. El público, que fue el más grande que he visto para un concierto de la Filarmónica, parecía disfrutar plenamente de la pieza, a pesar del hecho de que no se proporcionaron traducciones. No observé a nadie quejándose de no entender las palabras. Creo que eso le da a uno una nueva perspectiva de escuchar ocasionalmente dos o tres minutos de música que uno no podrá comprender inmediatamente.

¡Gracias a todos los que han hecho un compromiso en nombre de nuestra parroquia para la Apelación! Si aún no ha realizado su compromiso, conéctese de inmediato para realizar el suyo: diocesefwsb.org/aba. Cumplir y superar nuestra meta nos dará algo de dinero extra para apoyar la renovación de nuestro nuevo edificio de oficinas parroquiales y evitará que tengamos que recurrir a nuestros ahorros. ¡Gracias por su compromiso y su generosidad!

¡San Juan Evangelista, ruega por nosotros!

Suyo en Cristo,

Padre Royce Gregerson